Y si Perdono…¿Me Perdono?

En algún momento de nuestra vida, todos hemos experimentado heridas emocionales causadas por otras personas. Estas experiencias pueden dejarnos con sentimientos de ira, resentimiento, rencor o remordimiento, generando una carga emocional que nos impide vivir en plenitud. Por ello, trabajar en el perdón es una herramienta poderosa para liberarnos de esas energías negativas y alcanzar un estado de bienestar emocional.

¿Qué es el perdón y por qué es importante?

El perdón no significa justificar o minimizar el daño que hemos sufrido, ni implica olvidar lo sucedido. Más bien, es un acto de liberación personal. Al perdonar, dejamos de cargar con el peso emocional del conflicto y nos permitimos avanzar con mayor paz y equilibrio en nuestra vida.

Desde una perspectiva más elevada, como lo describe el chamanismo en el «nivel del Águila», podemos observar las situaciones con mayor desapego y comprender que las acciones de los demás no son ataques personales, sino reflejos de sus propias circunstancias, traumas y aprendizajes. Al entender esto, nos damos la oportunidad de soltar la carga emocional y recuperar nuestro poder.

El primer paso: No tomarse las cosas de manera personal

Uno de los aspectos más desafiantes del perdón es comprender que el otro no nos ha hecho daño intencionalmente, sino que ha actuado desde su propia historia y limitaciones. Esto no significa que debamos permitir comportamientos dañinos, sino que podemos elegir cómo interpretar y gestionar lo sucedido.

Cuando logramos dar este primer paso, empezamos a transformar nuestra perspectiva y dejamos de alimentar el dolor con pensamientos recurrentes de enojo o venganza.

Perdonar es aceptar

Algunas personas prefieren usar la palabra «aceptación» en lugar de «perdón», ya que implica reconocer la realidad sin intentar cambiar lo que ya ha sucedido. Aceptar significa soltar las expectativas de lo que pudo haber sido y liberar la carga emocional asociada al evento.

El perdón nos permite enfocarnos en el presente y dejar atrás el pasado, evitando quedar atrapados en una historia que ya no nos sirve. Nos ayuda a cortar la conexión negativa con la persona que nos lastimó y nos brinda la oportunidad de vivir con mayor ligereza y felicidad.

Ejercicio para trabajar el perdón

Si sientes que aún guardas resentimiento hacia alguien, te invito a realizar el siguiente ejercicio durante 21 días:

     

      1. Busca un momento de tranquilidad y cierra los ojos.

      1. Coloca tus manos en posición de oración sobre tu corazón.

      1. Visualiza a la persona con la que tienes el conflicto.

      1. Repite en voz alta:»Yo, (tu nombre completo), te perdoné y tú me perdonaste. Tú y yo somos uno ante el universo. Yo, (tu nombre completo), te amo y tú me amas también. Te agradezco y tú me agradeces. Gracias, gracias, gracias. No hay más resentimientos entre nosotros. Rezo sinceramente por tu felicidad. Sé cada vez más feliz. Muchas bendiciones para tu vida.»

    Este ejercicio puede sentirse incómodo al principio, pero con la repetición, notarás cómo tu corazón se va ablandando y la carga emocional disminuye.

    Perdonar no significa reconciliarse

    Es importante aclarar que perdonar no implica necesariamente retomar una relación con la persona que nos ha hecho daño. En algunos casos, la mejor forma de sanar es mantener distancia, pero sin cargar con el resentimiento.

    El perdón es un acto de amor propio, un regalo que nos damos para vivir en paz, sin permitir que el pasado siga afectando nuestro presente. Al soltar el rencor, nos abrimos a una vida más plena y feliz.

    Conclusión El perdón es una herramienta poderosa que nos permite sanar, liberarnos del dolor y vivir con mayor ligereza. A través de la aceptación y el desapego emocional, podemos transformar nuestras experiencias y convertirlas en aprendizajes valiosos.

    Podrías aprovechar las herramientas que te ofrecen las siguientes Formaciones avaladas:
    -> Animales de Poder

    -> Inteligencia Emocional

    -> Chamanismo Terapéutico Urbano

    -> Danza de Animales de Poder

    Recuerda: el pasado ya no existe, el presente es lo único que tenemos. Elige soltar, perdonar y seguir adelante con amor y gratitud.

    8 comentarios en “Y si Perdono…¿Me Perdono?”

      1. Hola Silvia, asintiendo lo ocurrido, sin cambiar nada de la historia. Es lo que pudiste hacer en ese momento. Tu ahora es distinto. Todos tenemos nuestra propia sombra, compuesta de todo aquello que visto desde afuera nos parecerá horrible. Abraza a tu sombra, porque tú eres esa sombra también. Eres todo eso, sólo que ahora que puedes verte, elige qué y quién quieres ser, simplemente eso.
        Saludos cordiales

    1. Es muy importante, el perdón, ya que nos hace sentir bien en nuestro cuerpo, reconocer nuestros errores cuesta pero cuando lo logramos nos liberamos que es de gran ayuda para nosotros, gracias por este ejercicio

      1. Hola Sergio, asi es, aceptar lo ocurrido sin tomarlo como una agresión personal, nos permite crecer, evolucionar de manera álmica.
        Gracias por comentar este artículo creado especialmente para este blog.
        Saludos cordiales.

    2. El problema que tengo es con mi hija ,ella tenía 8 años cuando falleció el papá mi esposo y yo quedé muy mal fue una muerte traumatica un accidente, hace 34 años mi hija tiene 41 años y hace 5 meses perdió un bebe de 5 meses de embarazo y quedó muy mal esta con Dr Siquiatra y psicología, pero ahora me reprocha cosas que yo le dije en su niñez, y esta enojada conmigo y me dijo que yo necesito un psicólogo.

      1. Hola María, seguramente su niña interior quedó muy dolida por no entender la ausencia de su papá y es bueno que acuda a terapia. Hiciste lo que pudiste en su crianza y con la mejor intención, seguramente.
        Te mando un abrazo.

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