Péndulo egipcio — Una técnica milenaria de salvación.

El péndulo egipcio emerge de los trabajos del radiestesista francés André Belizal, quien, al investigar las formas ancestrales de Egipto, descubrió similitudes con la Flor de Papiro, un antiguo amuleto denominado “ouadj” por los antiguos egipcios.


Según las conclusiones de Belizal, los egipcios eran habilidosos radiestesistas que habían refinado su técnica a lo largo de los siglos. Ejemplifica esta afirmación con monumentos, mobiliario y utensilios personales cuyas formas irradiaban ondas electromagnéticas, perceptibles con su péndulo universal.


Este instrumento, diseñado especialmente para búsquedas más específicas, les permitía captar estas energías.


En la actualidad, su visión del Antiguo Egipto se considera parte de un período en el que esta civilización estaba siendo redescubierta y ejercía una fuerte influencia en la imaginación popular.


La forma “ouadj” se encuentra en diversos aspectos de la cultura egipcia, adornando desde mangos de espejos hasta columnas de templos.


La presentación inicial de este concepto al mundo ocurrió en 1975, a través del libro “Física Microvibratória y Fuerzas Invisibles“, escrito conjuntamente por Belizal y P. A. Morel.


En dicho libro se menciona: “Este detector es la réplica exacta de un péndulo hallado en un sarcófago del Valle de los Reyes, lo cual evidencia que los egipcios de la época de los faraones ya conocían y practicaban la radiestesia. A aquellos que usaban el péndulo o las varillas radiestésicas se les llamaba zahoríes y los utilizaban para encontrar vetas de agua subterránea hasta a 30 metros de profundidad. Incluso en tiempos de guerra, el péndulo detectaba el mejor lugar para establecer campamentos“.


El péndulo egipcio posee la peculiaridad de ser un excelente emisor de ondas debido a su alargada y torneada forma, que potencia su capacidad energética.


De acuerdo con los autores, las características más notables de este instrumento incluyen:

• Sensibilidad particular a la radioactividad

• Sensibilidad destacada a los metales

• Amplificador de estados mentales

• Péndulo emisor

• Péndulo completamente neutro


Este péndulo figura entre los más utilizados en radiestesia y sanación. Puede confeccionarse en cuarzo, piedras, madera, cerámica y metales.


Actúa como un emisor y detector y, junto al anillo atlante (egipcio), pertenece a la Ciencia Invisible de los Faraones. Son más que simples amuletos; se emplean con la asistencia de Seres Superiores y la Clarividencia Sensitiva.


Aunque el péndulo egipcio de Belizal es el más reconocido, no existe una matriz única para todos. Diversos modelos coexisten, con medidas que varían entre 25 mm y 80 mm, así como distintos materiales.


El péndulo de cerámica, conocido como Péndulo THOT, se utiliza principalmente en geobiología. Por su parte, el péndulo egipcio o péndulo de Karnak puede elevar el nivel energético vital, espiritual o emocional en individuos, animales y objetos, además de realizar limpiezas energéticas.


Este péndulo, que inicialmente se elaboraba en otros materiales como bronce, madera, arenisca natural y plata, se caracteriza por ser un buen receptor y emisor de energía. Se le podría comparar con una “antena de mayor potencia”.


Cuando utilizamos el péndulo, entramos en contacto con la Energía Universal, lo que genera una constante transmisión de energía. Ya sea en una terapia de sanación o al recibir información, esta conexión es fundamental.


Namasté.


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